TÉCNICAS DE MINDFULNESS PARA ALCANZAR EL EQUILIBRIO

La semana pasada os hablé de lo interesante que es para nuestro equilibrio llevar a cabo las técnicas de meditación de Mindfulness. Hoy os voy a contar como hacer esas técnicas para alcanzar un nivel elevado de conciencia personal que nos permita ser más felices. Escuchar con el corazón y no con la mente, mejora nuestra calidad de vida.

Empezamos con los ejercicios, que son fáciles y nos llevan muy poco tiempo, pero nos aportan un beneficio enorme.

Respiramos aquí y ahora.

• Debes prestar toda tu atención a la respiración, inspira profundamente por la nariz  y suelta el aire por la boca intensamente, pero sin forzarte. Si notas que te estás distrayendo con algo de tu entorno, presta atención a que te ha distraído, para volver a centrarte de nuevo en la respiración.

Esta técnica nos hace desconectar de nuestros pensamientos, para centrarnos en lo que estamos haciendo en ese momento (respirar). Nos relaja y disminuye la tensión que acumulamos a lo largo del día de una manera muy simple.

Atiende a los sonidos que te rodean

• Escucha lo que pasa a tu alrededor, pero no intentes identificar el sonido, no pienses si es o no agradable. Sólo escucha y si algo te distrae, observa lo que te ha hecho desconcentrarte, para volver de nuevo a atender a los sonidos de tu entorno.

Este ejercicio sirve para aprender a captar sensaciones sin pensar. Es una experiencia, no un pensamiento. Nos permite desconectar el cerebro y atender al entorno sin utilizar la mente racional. Esto conlleva una relajación inmediata, si no piensas, el cerebro se permite el lujo de descansar… y eso no es algo que logremos muy a menudo.

Haz un barrido corporal

• Túmbate o siéntate en una posición relajada y, manteniendo la respiración como en el primer ejercicio, vas a ser consciente de todas las partes de tu cuerpo, desde los dedos de los pies hasta la cabeza, parte por parte, descubriendo lo que sientes en cada punto del cuerpo.

Este proceso, como todos los anteriores nos permite interiorizar las sensaciones y focalizar nuestra atención sin las interferencias del entorno.

Desayuna contigo mismo

• Siéntate con el desayuno en un lugar tranquilo, lejos de todo tipo de tecnología que pueda distraerte. Presta atención a olores sabores y cualquier otra sensación que te provoque lo que estás tomando.

Es una manera de romper la rutina matinal, que nos hace estar en modo automático el resto del día. Atendiendo al presente conseguimos relajar la mente y encarar mejor la jornada.

Son técnicas y ejercicios sencillos, que nos robaran unos pocos minutos cada día y nos harán llegar a un nivel de conciencia superior, donde el estrés y la ansiedad quedarán en segundo plano y nos permitirán resolver las situaciones del día a día con mayor tranquilidad.

RECUERDA CON LA IMPACIENCIA NO LLEGAS AL EQUILIBRIO.